lunes, 13 de enero de 2014

Mientras espero

No sé qué me está pasando que cuanto más envejezco, más pequeño me hago.

Hoy hace mucho volví a sentir esa sensación de cuanto tenía 13 años.

Estaba sentado en una roca esperando, con paciencia. Ella venía cada fin de semana. Era pesada, arrogante, muy masculina sentía yo o con una energía muy fuerte para mi. Me hacía sentir débil y vulnerable.

Llegaron las 5 de la tarde y yo en la roca donde habíamos quedado. Había esperado 2 horas. No sé por qué se iba a quedar los fines de semana con su tía, mi vecina. Apareció. Era un viernes, y ella aún con el uniforme, seguro despúes de la escuela tomó las malestas para su estadía con su tía. Yo quería creer que era por mi.

Platicamos hasta tarde como solíamos hacer. Era una roca grande en la que nos sentábamos. Creo que yo era el hermano que nunca tuvo, y yo creo estaba enamorado o también sentía que era como mi hermana.

Ahora está casada con una chica en Estados Unidos, a veces me escribe cartas enormes y yo le respondo escuetamente.

Mis ojos ahora están puestos por otro lado.

Hoy recordé la roca, a ella, porque vuelvo a sentir esa sensación de espera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario